Un tesitando me envía por correo una serie de preguntas solicitando mi colaboración y si es posible su remisión a otros expertos o conocedores por si quieren opinar:
Las preguntas son las siguientes:
¿Cree usted que los gobernantes (alcaldes,
gobernadores y presidentes) deben ser personas preparadas y Profesionales?.
Cree Ud. que la legislación actual que establece los requisitos para aspirar a un cargo público de elección popular es la más correcta y conveniente para sacar a delante el país.
¿Cuál es la carrera o ciencia idónea para Gobernar?
Qué opina de escoger a los gobernantes por Merito gracias.
¿Es el Derecho una Ciencia para gobernar?
Cree usted que la Administración Publica y las Ciencias Políticas como carrera son las más idónea para gobernar y ejercer cargos públicos.
Carreras como La Economía, la Ingeniería, Administración de Empresa y la Contaduría, forman gobernantes.
Cree Ud. que la legislación actual que establece los requisitos para aspirar a un cargo público de elección popular es la más correcta y conveniente para sacar a delante el país.
¿Cuál es la carrera o ciencia idónea para Gobernar?
Qué opina de escoger a los gobernantes por Merito gracias.
¿Es el Derecho una Ciencia para gobernar?
Cree usted que la Administración Publica y las Ciencias Políticas como carrera son las más idónea para gobernar y ejercer cargos públicos.
Carreras como La Economía, la Ingeniería, Administración de Empresa y la Contaduría, forman gobernantes.
Pasé a responderle de inmediato sin reflexión previa detenida y tras la lectura de cada cuestión y este es el resultado:
"A
la PRIMERA PREGUNTA: Inicialmente pienso que sí, pero en especial en la
administración local no tienen porqué ser profesionales de la Administración, sí contar con sentido político. Teniendo en cuenta que se trata de cargos
políticos ha de considerarse que la Constitución señala el derecho a participar
en los asuntos públicos y en especial a acceder a las funciones y cargos
públicos con los requisitos que marquen las leyes. Los cargos públicos de
elección no se sujetan a requisitos de mérito o a los conocimientos
profesionales. Por ello el sistema desde mi punto de vista exige de una
Administración profesional con una carrera basada en el mérito y la capacidad y
alejada de la designación de los políticos. Lo que no cabe duda es que si quien
gobierna es una persona preparada sus decisiones partirán de una mejor
información debido a su formación. El sistema, pues, entiendo que parte de la
verdadera democracia interna de cada partido político al elegir a los que han
de representarlos y en caso de gobernar ocupar los cargos de designación
política. Pero es indudable que los partidos se rigen por élites o grupos y
fidelidades que nada tienen que ver con el mérito y la capacidad.
Hay
que comprender que en determinados niveles de administración hay personas
sencillas con un gran sentido común y capacidad de gobierno que sólo necesitan
a su lado de buenos y profesionales administradores.
A la SEGUNDA PREGUNTA: En mi primera contestación ya hay
parte de la respuesta, pero para que ahora sea completa tendría que repasar
cada ley que establece requisitos para gobernantes y altos cargos de la
Administración. Puede servir para el tema le entrada siguiente de mi blog:
Así pues en
el Estado, la ley de Organización de su Administración parece profesionalizar
una serie de cargos, pero realmente sólo afecta al nivel estrictamente
burocrático o de administración general, no tanto a la administración especial,
pero también es cierto que en ésta y para el nivel político y configuración de
políticas públicas ha de admitirse la incorporación de buenos profesionales
provenientes del sector privado. Que esto ocurra o no o que sean verdaderos
expertos depende de los partidos y de los gobiernos y de su ética y moral.
Por todo
ello no puedo decir que los requisitos no sean idóneos, sin perjuicio de que
hubiera que despolitizar más cargos y funcionarizarlos, lo que sí corresponde
es que los nombramientos que incumplan los requisitos sean recurribles y
anulables sin las trabas del derecho subjetivo o interés legítimo que
restringen el recurso en estos casos. Otra cosa es la que se refiere a las
listas abiertas a efectos electorales que creo que no interesa a los partidos
políticos en su configuración actual y que no garantiza tampoco que rija el
mérito y la capacidad, si bien pueda acotar el nivel o porcentaje de
responsabilidad de cada cual y en especial frente a sus electores.
A la
TERCERA PREGUNTA: Creo que hay dos carreras que en principio comprenden
materias y conocimientos que un gobernante ha de tener y son la de Ciencias
Políticas y de la Administración y la de Derecho, preferentemente en aquellas
universidades que distinguen la rama y disciplinas del Derecho público y
que incorporan otras disciplinas necesarias, por ejemplo Economía o Ciencia de
la Administración. Pero hoy es frecuente que se produzcan posibilidades de
cruzar unas y otras carreras, mediante convalidaciones. Pero hoy en día también
hay que tener en cuenta, desde mi punto de vista, por lo que corresponde a la
Ciencia de la Administración, la escuela y tendencia que la imparte, pues, y el
que se ofrezca la visión y concepto que nos ofrece Baena del Alcázar es
esencial, sin perjuicio de que se complete con las técnicas del buen
administrar lo público, sin exageradas influencias de la gestión privada de
empresas.
El Derecho
era la única carrera que durante mucho tiempo marcó la pauta y hoy debe de
seguir siendo esencial su conocimiento, por lo que adquirir sentido jurídico es
esencial en los que sigan la carrera de Ciencias políticas o es necesario que
no se limite en esta carrera a ser una asignatura de segundo orden,
naturalmente me refiero al derecho público y muy particularmente al Derecho
administrativo. Lo que hay que tener en cuenta, desde mi punto de vista, es que
el gobernante y el político no es sólo un aplicador del derecho o de las leyes,
sino que contribuye a la configuración de las normas y el derecho, por lo que
el conocimiento de los principios generales que conforman el derecho y la
justicia han de ser parte de la formación.
Personalmente
creo que una persona formada en Derecho es más fácil que se complete con los
conocimientos de la Ciencia política y administrativa que una formada en estas
adquiera sentido jurídico. Pero es una opinión, teniendo además en cuenta la pérdida
del estudio de los clásicos.
A la CUARTA
PREGUNTA: Ya he contestado en buena parte con lo anterior pero creo que todo
depende de la dimensión que se dé a la parte política y el número de puestos y
funciones de la misma, porque lo malo es el abuso en considerar políticos
puestos que son meramente de administración y propios de los funcionarios y de
un sistema de mérito y capacidad. Los estrictamente políticos es muy bueno que
cuenten con los méritos propios para su ejercicio o desempeño pero no necesario
si existe una administración profesional. Pero sabrá que precisamente la
tendencia es la contraria: apropiarse del sector administrativo y de gestión y
politizar el sector profesional. Es bueno, pues, la existencia de mérito y
profesionalidad en los políticos, no es la panacea y lo que sí es
imprescindible es que la Administración sea profesional y no dependiente de los
políticos, salvo en un nivel muy superior y limitado y muy conectado con
programas o políticas públicas concretas y especiales que necesiten de equipos
de confianza del político y de una libre designación dentro del sistema de
mérito y capacidad y no desvirtuado como en la actualidad.
A la
QUINTA: Vamos a ver, el Derecho no es, en principio una ciencia para gobernar,
pero la ciencia de gobernar y el gobierno mismo no pueden existir sin el
Derecho. Lo que hace que se pueda decir que el Derecho es una ciencia
imprescindible para Gobernar, pero es la ciencia de la Justicia y de la Equidad
y en el Derecho hay más operadores que los gobernantes.
A la SEXTA:
La creo respondida en la Tercera
A la
SÉPTIMA: Mi opinión es que no. La Economía complementada con Derecho y estudios
serios de Administración pública puede formar gobernantes y administradores.
Pero economistas, ingenieros etc. son necesarios en el gobernar y administrar
de cada día
He
respondido, prácticamente vuela pluma, por lo que creo que mis opiniones no
están condicionadas por nada. Espero que le sea útil. Pero todo es muy
complejo."
Es seguro que quedan muchas cosas que decir o analizar sobre el tema y alguna respuesta haya dejado algún aspecto por tratar, por ello si alguien con experiencia tiene una opinión distinta y quiere colaborar ofreciendo su opinión al interesado, ya que solicitaba el envío de su correo a conocedores del tema, en esta dirección eat26031972@hotmail.com se le puede ofrecer opinión.
La vieja receta. La del gobierno de los más capaces. Lo peor es cuando dicha receta se realiza en medio de un presunto discurso de radicalidad democrática o "regeneradora". ¡Cuando es un argumento netamente antidemocrático!
ResponderEliminarLa formación se pueda convertir en una farsa si se tiene el dinero suficiente (esos señores de clase elevada que compran títulos en universidades privadas o contratan a señores diversos para que les saquen el doctorado/Máster correspondiente). Además, en determinados contextos sociales hoy nada inimaginables (por ejemplo: con un acceso limitado, por la renta disponible, a la Universidad) el exigir requisitos formativos para ser representantes públicos equivale a excluir a determinadas capas sociales de las tareas de gobierno. Con independencia del aprecio o apoyo que tengan entre el pueblo. ¡Menuda democracia!
Por supuesto, resulta indiferente qué alto sea el cargo público electo. Exigir tal o cual requisito formativo o de mérito, elevar tal o cual barrera, es inaceptable. A cualquier nivel. A eso de que a determinados niveles valdrían "personas con sentido común bien asesoradas" le ha faltado alguna referencia explícita a "aldeas y provincias". En fin...
Bastante iracundo la verdad.Y aunque el blog es mi casa aquí queda lo que dice. No creo que el sentiodo común baste por ejemplo para ser ministro o director general, donde se trata de administrar pese a ser cargos políticos.
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